Sembrar de flores
El verdadero espíritu de la Medicina es aliviar el dolor y el sufrimiento.
Si bien la práctica de la medicina nunca debe perder este norte, la práctica de los Cuidados Paliativos es quizás la más pura expresión de esta máxima.
Los médicos no curamos, «sólo Dios puede curar». Pero sí podemos aliviar el dolor y el sufrimiento. No lo olvidemos.
Mi humilde aportación al despedirme de la profesión es el documento «Manejo del enfermo terminal» y para dejarlo a disposición de todo el mundo, hago este blog. En este documento resumo de forma cuidadosa todo lo que he aprendido atendiendo a 4018 enfermos terminales, la mayor parte de ellos en su lecho de muerte (desde 1 Noviembre 2016 hasta 18 Octubre 2013, durante casi 17 años como el médico a cargo de la hospitalización de Cuidados Paliativos del Hospital Virgen de las Nieves de Granada, tras otros 15 años previos trabajando como Médico Internista en el hospital).
Lo considero una aportación porque en tan duros momentos he sido un respetuoso acompañante de enfermos, familiares y acompañantes, que en los últimos años me permitieron hacer una una investigación sobre la medición del nivel de conciencia en el umbral de la muerte. En todos estos casos pudimos controlar mucho mejor los síntomas y pudimos aprender, junto con todo el equipo del hospital, importantes lecciones que cambiaron nuestra forma de entender la conciencia en enfermos aparentemente inconscientes y/o sedados.
Entre todos, pudimos sembrar de flores el camino del cementerio de casi 4000 personas. Espero que así sea para todos, cuando nos toque ir por ese inevitable camino.
3 pensamientos en “Sembrar de flores”
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Francisco Pinedo
Doctor Cepa, nadie como usted ha sabido sembrar de flores el camino al cementerio. Ayudó a irse a mi suegro (Francisco Alonso) de una forma tan… especial que toda la familia quedamos tocados por sus palabras, su cariño y su atención. No sólo fue con nosotros, los familiares de los otros enfermos opinaban de igual forma.
Sus palabras nos reconfortaron a todos, sus hijas no le olvidan, ni yo mismo, siempre decimos que cuando nos toque la hora sea usted quien nos atienda, y ahora vemos que ya no está en el hospital. Es una pérdida que realmente lamentamos y deseamos lo mejor para usted.
racepa
Gracias Francisco, me acuerdo de tu suegro y de dos de las hijas, os envío mis saludos a todos.
Salí de la Medicina porque hay situaciones insostenibles por parte de la Administración y de las que no vale la pena hablar. Ahora se abren otros horizontes, me enfoco en la salud, no en la muerte, se abren puertas que no imaginaba (sin duda, el cielo nos guía a todos). Ha sido un largo tiempo con los enfermos paliativos, 17 años… una lección vital sin igual. Un abrazo luminoso para todos!